Después de celebrar una feria a medio gas el año pasado a causa de la pandemia, Porreres volvió a brillar este domingo con luz propia durante la tradicional Fira de Tardor. Miles de personas llenaron las principales calles del pueblo en las que las entidades locales y los comercios del pueblo mostraron todo su potencial.
No faltaron los productos de artesanía ni los alimentos de kilómetro cero. El buen tiempo también propició a que los ciudadanos se animaran a salir y convirtieran las calles más céntricas en verdaderos ríos de gente.
El mundo agrícola también estuvo presente durante la muestra de animales autóctonos, que se ha recuperado este año después de varias ediciones sin poderse celebrar. La parte cultural llegó de la mano de varias exposiciones y de distintas actuaciones musicales en la plaza de la Vila. Tampoco faltó una demostración de ball de bot a cargo de s’Estol Porrerenc. Las entidades locales también aprovecharon la jornada de este domingo para difundir su trabajo entre los visitantes, como la nueva asociación Veus Feministes, que nació en marzo de 2022 y que vendió dulces y recaudó dinero para poder colocar una placa en la fosa de Porreres en recuerdo a todas las mujeres represaliadas durante el franquismo.