El Ajuntament de Marratxí destina 1,7 millones de euros de remanente de tesorería a la renovación completa de la red de agua potable de Sant Marçal, en la que se detectó una cantidad anormal de fugas en 2006 y que resolverá los históricos problemas de suministro de la urbanización. Los trabajos empezaron el pasado junio y consisten en la sustitución de la red de distribución desde el depósito de cabecera hasta las llaves de acometida para evitar incidencias en el suministro y la presión del agua potable, ha detallado este viernes el consistorio en un comunicado.
La renovación ha sido necesaria porque desde el año 2006 la concesionaria detectó un número anormal de fugas de agua en la urbanización de Sant Marçal, que se construyó a finales de los años 90.
Después de que el ayuntamiento marratxiner realizara una auditoría de la red, decidió hacer frente a estas obras de mejora de forma subsidiaria ya que, como quedó acreditado por sentencia judicial, la concesionaria es la responsable del mantenimiento de la red. La red da servicio a 542 viviendas, el instituto, un edificio municipal, un centro deportivo, las zonas ajardinadas de la urbanización y en los equipamientos comerciales.
Para que todos los contadores tengan una presión adecuada, el proyecto contempla la división de la red en 3 sectores. El sector 1 lo forman las calles que quedan en una cota más baja, que es la franja de la urbanización comprendida entre las calles Formiguer y Antoni Amengual-Gerrer. El sector 2, que son las calles de cota intermedia, está comprendida entre las calles Antoni Amengual, Pere Romà rector y la zona de poniente de la calle Mestre Lluc Mesquida. El sector 3, en los viales con cotas más altas, está limitado por las calles Antoni Ramis, Mestre Lluc Mesquida, Joan Binimelis y la calle Casa del Poble.