El GOB y Terraferida criticaron este miércoles que la Demarcación de Costas en Balears no haya intervenido antes en las obras de reforma y la apropiación de la cueva de Cala Vinyes por parte del expropietario del equipo de fútbol inglés Newcastle, Mike Ashley. «Costas no hace su trabajo y los ayuntamientos, conociendo estas sobrecoupaciones, hacen la vista gorda», lamentó el portavoz de Terraferida, Jaume Adrover.
A raíz de la consulta formulada por este diario, Costas ha solicitado una inspección e informe al vigilante de la zona para que compruebe si las obras de reforma se han hecho recientemente. Adrover considera que estas personas con tanto dinero «hacen lo que quieren porque saben moverse en estos entramados e incluso hasta qué punto pueden revalorizar el inmueble», dijo, porque la inmobiliaria que tiene la mansión de Ashley a la venta por 35 millones de euros. Destaca que cuenta con una «cueva privada», pese a que en el Catastro se puede consultar que la parcela no incluye este espacio, ubicado tanto en dominio público como en la zona de servidumbre de protección de Costas. Adrover advirtió de que hay «centenares» de casos como este a lo largo de toda la costa de Mallorca.
La portavoz del GOB, Margalida Ramis, se pregunta cómo es posible que se pueda comprar y vender dominio público. «Es escandaloso», afirmó, y recordó que la Ley de Costas establece que únicamente se podrá permitir la ocupación del dominio público para aquellas actividades o instalaciones que, por su naturaleza, no puedan tener otra ubicación. «No es el caso de esta cueva», apunta Ramis.