La fiesta del Much marcó este lunes, pero para muchos el regreso a casa tras la celebración se convirtió en un verdadero calvario. Al finalizar la fiesta el andén de la estación de Sineu estaba repleto de personas que esperaban el ferrocarril tanto en dirección a Palma como a Manacor.
La situación caótica por falta de convoyes ya se había producido horas antes, por el gran número de personas que acudió a Sineu en transporte público. Algunos incluso tuvieron que esperar ya que no cabía más gente en los vagones. Trabajadores del Serveis Ferroviaris de Mallorca también lamentaron ayer la situación por la falta de seguridad que se generó.
Los usuarios afectados indican extrañados que desde el Govern no se hubieran previsto frecuencias de trenes especiales como sí sucede cuando hay otros eventos de este tipo.