Una excavadora ha comenzado a retirar los residuos acumulados sobre la arena de la Platja Petita de Can Picafort, que habían provocado quejas de los vecinos y negocios de la primera línea por los fuertes olores a descomposición que desprendían. El Ajuntament de Santa Margalida ha encargado la limpieza de esta pequeña playa urbana después de que la dirección general de Residus del Govern haya concluido que se trata de restos de posidonia marina y que no precisan ningún tratamiento especial.
El alcalde de Santa Margalida, Joan Monjo, ha criticado a la Conselleria de Medi Ambient por haber tardado en responder a sus quejas. «En mayo mandamos una carta a la Conselleria explicando los problemas y quejas que provocaban estos restos acumulados sobre la playa. En junio volvimos a comunicarlo, sin obtener ninguna respuesta; si Medi Ambient hubiese respuesto antes, estos problemas que han generado los olores a turistas y residentes ya se habrían resuelto hace un mes y medio», apunta.
La Platja Petita de Can Picafort ha permanecido sepultada de una capa de residuos maolientes durante este inicio de temporada. Hace unos días, negocios de restauración y vecinos con casas en la primera línea frente a esta playa se quejaron por la situación, que impedía disfrutar de las terrazas e incluso espantaba a la clientela de los restaurantes. El Ajuntament consideraba que estos restos proceden del interior del club náutico de Can Picafort, «que deposita sus sedimentos en la zona más externa y luego las corrientes marinas los devuelven hasta la orilla», asegura Monjo. Sin embargo, Medi Ambient asegura que la inspección realizada por un técnico de Residus y un agente de Medi Ambient han determinado que no se trata de lodos nocivos, sino de restos de posidonia en descomposición, y ha autorizado su retirada. Los vecinos de la zona celebran que se haya resuelto la situación. El concejal de Turismo, Eugenio Garrido, había lamentado las molestias que estos olores causaban a turistas y residentes.