Las ganas de salir a la calle y compartir el día de Sant Jordi con amigos y vecinos fue la tónica general en todos los municipios de la Part Forana. Por la mañana solo aquellos pueblos con actos en interior o las parades de libros en el claustro de Manacor aguantaron el chaparrón. A partir del mediodía ya todo cambió y los libros y las rosas ganaron protagonismo. Al finalizar el día los libreros mostraban su satisfacción por las ventas. En algunos pueblos se celebrará la fiesta este domingo
En Artà, debido a la lluvia de la mañana las parades previstas en el pueblo se trasladaron hasta el interior del mercado. Allí muchos vecinos pudieron elegir sus obras sin mojarse. En Inca las librerías de la ciudad sacaron sus libros a la calle; a lo largo del día los plásticos para cubrir los puestos dejaron paso a la gente que se acercaba para conocer novedades o buscar algún ejemplar.
La plaza de l'Orient de Capdepera fue el escenario para celebrar Sant Jordi con actividades para los niños y parades de libros fueron los protagonistas del día. En Muro, como en el resto de la Isla, por la mañana se vivió la festividad de Sant Jordi bajo la lluvia pero por la tarde las parades estuvieron más concurridas. Y en Calvià, el Passeig del Mar de Palmanova acogió talleres, animación y puestos de libros; hasta ocho escritores locales presentaron sus trabajos.