La inacción de la dirección regional del PP respecto a Calvià podría pasar una elevada factura a la formación que lidera Marga Prohens en las elecciones locales que tendrán lugar el próximo año. La situación de parálisis total por parte del PP ha llevado a un número destacado de afiliados y simpatizantes a organizarse alrededor de Calvià Suma, una plataforma que funciona como grupo de Facebook y que cuenta ahora los días para formalizarse como partido político. Entre quienes impulsan esta alternativa de centro derecha se encuentran personas vinculadas al PP en su ámbito municipal, como Raimundo Piña o Juanjo García, quienes a su vez tratan de aglutinar más voluntades, captando descontentos de la formación conservadora, pero también de Ciudadanos o de Vox.
Todo, supeditado a que desde Palau Reial se empeñen en no mover ficha y dejen que el PP, en el gobierno durante tres legislaturas consecutivas hasta 2015, siga con un hundimiento que en los últimos comicios le llevó a cosechar los peores resultados de su historia. Admiten desde Calvià Suma que su aspiración no pasaría más allá de sumar un regidor, pero confían al mismo tiempo en que su existencia sirva «para que en Palma se pongan las pilas», donde no encuentran la forma de solucionar un problema enquistado desde que Manuel Onieva abandonara la dirección del partido.
De aquella lejana época se ha intentado rescatar a la ex teniente de alcalde Cristina Tugores, quien ha declinado ser cabeza de cartel en 2023, consciente del gris panorama al que se enfrenta el PP. Fuentes próximas al partido temen de hecho «no pasar de tres regidores», mientras se siguen acumulando los cadáveres políticos en el armario. El último, José Miguel Fabregat, apartado semanas atrás de la gestora sin previo aviso. El temor entre quienes sienten el PP como propio es que, en realidad, no haya nadie que quiera «comerse el marrón» de encabezar las listas en unas elecciones para las que restan solo trece meses.
Punto de vista
Con la vista puesta en 2027
Pedro Aguiló Mora¿Qué día se jodió el PP en Calvià? Empezó a joderse el día en que José Ramón Bauzá vetó a Joan Thomàs como candidato a las elecciones de 2015 y designó a José Manuel Ruiz; y se jodió del todo cuando éste, fiasco electoral mediante, rechazó en 2016 pactar el liderazgo de la junta con Carlos Delgado. Ahora, con la vista más puesta en 2027 que en 2023, será la dirección regional quien en otoño designe al gestor político que deba rehacer el partido. Y sin presiones.