Una de las principales arterias de Inca, la Gran Via Colom, será objeto de una renovación que afectará al alumbrado público y al asfaltado. El objetivo del Ajuntament es responder a las demandadas de vecinos y comerciantes que reclaman una mayor visibilidad y disminuir las molestias que provoca el tráfico rodado. Las obras de renovación del alumbrado público de la Gran Via Colom ya han comenzado y tienen un presupuesto de 255.917 euros. La constructora Melchor Mascaró es la encargada de realizar los trabajos que tienen un plazo de ejecución de cuatro meses y que obligarán a cerrar al tráfico rodado algunos tramos. Por ello, la Policía Local ha diseñado una serie de vías alternativas para evitar molestias a los vecinos y conductores.
La renovación y mejora del alumbrado supondrá también la retirada del actual cableado, que estaba muy deteriorado y provocaba constantes averías. Por esta razón el proyecto prevé la instalación de nuevas canalizaciones y conductores soterrados. El alcalde de Inca, Virgilio Moreno (PSOE), indica que «esta actuación es imprescindible y muy necesaria ya que las instalaciones se encontraban en malas condiciones. Esta renovación del alumbrado nos permitirá también incrementar la iluminación de la zona y reducir el gasto gracias a la eficiencia energética».
Entre otras medidas que se aplicarán figura la limitación del resplandor luminoso nocturno y la reducción de la luz molesta a ciertas horas de la noche. Para ello entrará en funcionamiento un sistema de temporización de los niveles de brillo incorporados en cada procesador de gestión de las luminarias. La sustitución del alumbrado público conllevará también una renovación del pavimento asfáltico de la Gran Via Colom en las zonas afectadas por las obras. Además de la instalación y mejora de nueva señalización viaria, se prevé la instalación de dispositivos reductores de velocidad para mejorar el tráfico rodado y evitar que los conductores circulen a una velocidad excesiva.
Tanto la falta de alumbrado en condiciones como el constante paso de vehículos en una de las principales calles de entrada a la ciudad son dos de las principales quejas que los vecinos de la zona habían hecho llegar al Consistorio inquer. El alcance de los trabajos afectará también a la plaza de la Llibertat y a la rotonda de Jaume I, que se encuentran en los extremos de la Gran Via Colom. El paseo peatonal central no será objeto por el momento de ninguna actuación integral.