El municipio de Calvià será el pionero en España a la hora de contar con un protocolo de detección de violencia de género contra mujeres mayores de 65 años. Según la catedrática de la UIB Carmen Orte, se trata del primero de estas características a nivel autonómico y será la herramienta con la que contarán los profesionales de diversos ámbitos que trabajan con las mujeres mayores para detectar posibles casos de violencia de género. Para hacer posible esta detección, el protocolo utiliza un lenguaje común y criterios unificados, que establecen la gravedad de los diferentes niveles de riesgos detectados en cada situación, y las fases a seguir con las actuaciones y escalas que será necesario emplear si hay sospecha de que la mujer sufre una situación violenta.
El Ajuntament de Calvià presentó este miércoles el estudio ‘La violencia de género en la mujer mayor de 65 años. Protocolo de detección', elaborado por la propia Orte y la doctora en Educación Lydia Sánchez. El objetivo es analizar la realidad de las violencias machistas en el colectivo de mujeres mayores de 65 años. Para su elaboración, expusieron Orte y Sánchez, se crearon dos grupos focales de personas expertas en materia de violencia de género y en personas mayores que trabajan en Calvià como profesionales del ámbito social, sanitario, psicológico y fuerzas de seguridad; además de otros participantes de servicios de atención domiciliaria, atención primaria, servicios sociales, bibliotecas y policía.
De los datos aportados por estos grupos, se ha llegado a una serie de conclusiones resumidas en que, en general, la mujer mayor de 65 años no denuncia ni solicita ayuda directamente; que las vías más importantes de detección son las personas profesionales o servicios a las que acuden más a menudo y donde el vínculo profesional es de mayor confianza, o que se hace necesario contemplar las campañas de sensibilización de forma diferente y dirigirlas hacia la toma de conciencia por parte de familia, vecino, amistades, círculos sociales y comunidad.
El apunte
El protocolo arrancará en 2022 y se compartirá con otras administraciones
La teniente de alcalde de Cohesión Social e Igualdad, Nati Francés (PSOE), explicó que el Ayuntamiento decidió llevar a cabo este estudio por la confluencia de dos políticas: la atención a las personas mayores y la lucha contra la violencia de género. «El estudio lo que hace es dar la herramienta a las personas que trabajan directamente con mujeres mayores para detectar esta violencia en las mayores de 65». Según Francés, el protocolo se pondrá en marcha en 2022 entre los profesionales que ya han participado en el estudio, y se pone al alcance para otras administraciones.