El Ajuntament de Pollença aprobó este viernesuna modificación de crédito de más de 2,7 millones de euros para afrontar (entre otras cosas) la creación y mejora de infraestructuras y espacios públicos como la zona urbana de Cala Barques en Cala Sant Vicenç, La Vinyeta en Pollença y el polideportivo en el Moll.
La mayoría de proyectos están subvencionados parcialmente por el Consell que aporta 357.397 euros para planes de mejora de la sostenibilidad y eficiencia urbana y 216.639 euros para instalaciones deportivas.
Todos estos proyectos serán posibles gracias a la exención del cumplimiento de algunos preceptos de la Ley Montoro que, con motivo de la COVID-19, aprobó el Gobierno central. Permite a los Ayuntamientos gastar el dinero que tenían inmovilizado en el banco.
«Un comodín»
Además de la modificación de crédito para la creación y mejora de infraestructuras, el Ajuntament aprobó también ayer en pleno modificaciones de crédito para el pago de gasto corriente, cuestión que fue criticada por Podem (en la oposición) que teme que la suspensión de la llamada regla de gasto se use como «un comodín».
El alcalde, Tomeu Cifre, justificó la necesidad de habilitar más dinero en el hecho de que «hay una caída importante de los ingresos previstos en los presupuestos como consecuencia de la suspensión de algunas tasas e impuestos».
Por otra parte, en el pleno de este viernes se estrenó como regidora de Alternativa Tonina Amer.