El polémico proyecto del parque fotovoltaico que Aena quiere construir en sus terrenos de Son Bonet (en el municipio de Marratxí) no cuenta con el apoyo del Govern. El Consell de la Indústria que se celebró ayer tumbó el proyecto por el rechazo social que ha tenido la instalación desde que se anunció y por el informe en contra que emitió el Ajuntament de Marratxí. Además, fuentes del Govern anunciaron que el «proyecto no incluye ninguna medida compensatoria adicional a las propias de un parque fotovoltaico que impliquen un valor añadido para la declaración como un proyecto industrial estratégico». Ahora el Consell de Govern deberá ratificar esta postura.
En este punto, el vicepresident del Govern y conseller de Transició Energètica, Sectors Productius i Memòria Democràtica, Juan Pedro Yllanes, indicó que «ha habido un alto rechazo social al proyecto» y señaló que «la generación de energía distribuida debe contar con el mayor consenso posible, que no se ha dado en este caso».Con estas palabras, Yllanes hizo referencia a las más de 1.500 alegaciones que se han presentado a este proyecto.
A pesar de esta decisión del Consell de la Indústria, Aena dijo ayer que no tiene conocimiento formal de esta resolución por lo que «desconocemos los detalles que fundamentan la decisión adoptada». Las mimas fuentes añadieron que «con independencia de la no declaración del proyecto industrial estratégico, seguiremos con la tramitación administrativa del proyecto». El conseller, por su parte, opinó que «Aena puede instalar placas solares en sus edificios, como el aeropuerto de Son Sant Joan, y cubrir los aparcamientos».
Plataforma
Tras el anuncio del impulso de un parque fotovoltaico por parte de Aena en febrero de 2020, con una ocupación de casi 20 hectáreas y una instalación de 32.318 paneles solares, los vecinos de la zona se movilizaron y crearon la Plataforma Son Bonet Pulmó Verd, con la que se han llevado a cabo un gran número de actos para mostrar el rechazo social a este proyecto de paneles solares. Grupos ecologistas y políticos, además del Ajuntament de Marratxí, también han mostrado su rechazo a la propuesta.
El director general d'Energia i Canvi Climàtic del Govern, Pep Malagrava, recordó ayer esta oposición. «Los proyectos fotovoltaicos pueden ser más o menos polémicos, pero es cierto que en ninguno habíamos tenido más de 1.500 alegaciones en contra. Por esta razón, los parques que no cuenten con un mínimo consenso y no aporten un valor añadido al de la generación de energía renovable no pueden ser estratégicos».
El apunte
El Ajuntament de Marratxí y el Consell también se opusieron a este campo solar
Tanto el Consell de Mallorca como el Ajuntament de Marratxí aprobaron por unanimidad en sendos plenos celebrados a principios de este año 2021 una declaración institucional en contra del proyecto fotovoltaico. En la institución insular ser escogió que «el impacto que producirá este campo solar en Son Bonet es más que considerable» y calificó los terrenos como «no adecuados para esta instalación». En el Ajuntament de Marratxí también defendieron esta postura y apostaron por la necesidad de buscar vías alternativas al proyecto. El alcalde de Marratxí, Miquel Cabot, también se reunió con Aena para intentar frenar el parque, aunque el encuentro no dio sus frutos. Por su parte, el senador de Més per Mallorca, Vicenç Vidal, llevó hasta el Senado las reivindicaciones de la Plataforma Pulmó Verd y trasladó el malestar y la oposición al proyecto de parte de la sociedad.
El apunte
Bunyola tendrá 80.000 placas
El Consell de la Indústria sí declaró este jueves como un proyecto industrial estratégico el parque fotovoltaico Mallorca Sostenible, que se ubicará en el polígono industrial de ses Veles de Bunyola. Esta instalación solar generará 40 millones de vatios, el equivalente al suministro eléctrico de 12.000 viviendas, a través de las 79.920 placas solares que se colocarán una superficie inicial de 32,2 hectáreas, aunque está previsto que llegue a las 79 hectáreas. Según fuentes del Govern, el impulso de este proyecto generará cerca de 400 puestos de trabajo durante la fase de ejecución y un total de 15 nuevos puestos de trabajo durante la fase de operación. El conseller de Transició Energètica, Juan Pedro Yllanes, que defenderá este proyecto como estratégico en el Consell de Govern, dijo ayer que «este parque se ubicará en una zona industrializada y este hecho, junto a la propuesta de almacenaje, son factores esenciales para las Balears porque tenemos mucha dependencia de energía solar».