La aventura vivida por cuatro amigos en la Costa Nord de Mallorca ha servido como ejemplo para difundir un mensaje desde la Fundación Vida Silvestre Mediterránea (FVSM).
La entidad ha pedido a los navegantes que presten atención a las escarpadas rocas de la cara norte de la Serra de Tramuntana, y si divisan algún joven ejemplar de voltor (buitre negro) caído al mar o atrapado en las rocas, desde donde no pueden alzar el vuelo, puedan rescatarlo. Hace unos días, cuatro amigos divisaron desde su embarcación a un voltor que había caído al mar cerca de la Cova de ses Bruixes y no podía salir del agua. Entonces, uno de ellos se puso la careta de buceo y se tiró al agua para rescatarlo y entre todos lo subieron al barco, no con poca dificultad. Una vez a bordo, le cubrieron la cabeza con una toalla, con lo cual se quedó quieto hasta que lo entregaron a personal del COFIB en el Port de Sóller, salvándole de una muerte segura por agotamiento.
La responsable de FSVM, Evelyn Tewes, les citó en la sede de la Fundación para agradecer su valentía, y anima a otros navegantes a contribuir a salvar a estos jóvenes voltors que se caen de los nidos situados en lo alto de los acantilados.
«En septiembre y octubre salen de los nidos, pero aún son torpes o no saben volar bien y ocurren estos accidentes; vale la pena prestar atención cuando naveguen cerca de la costa y salvarlos, tirando de ellos con cuidado por la punta del ala o la cola, para evitar el pico o las garras, como hicieron ellos; luego cubrirles los ojos, porque cuando no ven ya no se defienden».
Los avisos se pueden dar llamando al teléfono de Emergencias 112 o bien al del COFIB, 971 14 41 07.