Después de un año y medio con tres intentos de celebrarla, el 9 y el 10 de octubre tendrá lugar la XVIII Fira del Vi de Pollença.
Llegará con novedades como el cambio de ubicación. Pasará del claustro de Sant Domingo al solar de Can Conill, donde se instalarán carpas individuales para las 34 bodegas mallorquinas que participarán en el evento. A estas se sumarán otras 18 bodegas de la DO Montsant que vuelven a Mallorca para reforzar el hermanamiento que se hizo entre la Fira del Vi de Pollença y la de Falset.
El regidor de Fires, Miquel Llobeta, justificó el cambio de ubicación porque «es un lugar más adecuado por la situación en la que nos encontramos».
El presidente de la asociación Vi Primitiu, Josep Bibiloni, que organiza la Fira junto al Ajuntament, indicó que «la feria se podrá visitar el día 9 de las 10 a las 20.30 horas mientras que el domingo 10 el horario será 10 a 14 horas». Las entradas costarán 15 euros y se entregará un vale de 5 euros para utilizar en la compra de vino, así como una copa para las catas.
El alcalde de Pollença, Tomeu Cifre, resaltó «la ilusión con la que las bodegas esperan la feria» así como el cartel de Aina Perelló, «con una imagen dotada de gran sensibilidad y que invita a emocionarse con el vino».
Los organizadores esperan que la Fira de 2022, programada para el 7 y 8 de mayo, pueda volver a su ubicación original.