Ni tractores, ni motosierras, ni maquinaria agrícola. Las ferias de Mallorca dejarán de contar a partir de ahora con una parte muy destacada de sus exposiciones tras la decisión unilateral adoptada este pasado lunes por las empresas del sector.
La escasa, cuando no nula rentabilidad de este tipo de acciones promocionales es lo que ha impulsado a cerca de una quincena de compañías de maquinaria a dar un paso atrás. Se retiran todas, desde las que facturan más de dos millones de euros anuales hasta las que no ingresan más de cien mil euros. Y lo hacen, aseguran fuentes del sector, después de «décadas» en las que han intentado, sin suerte, sacar rendimiento económico a su presencia en este tipo de eventos.
La decisión se adopta con carácter inmediato y provocará que ya en las próximas ferias de Llucmajor, o en el propio Dijous Bo, desaparezcan unas exposiciones que atraían a cientos de personas y que llenaban de color varias calles de localidades como la de Inca, donde cada año se llegan a reunir durante la popular feria de noviembre cerca de 200 unidades de todo tipo de material agrícola. Con mucho visitante, pero sin ningún gasto. Hasta que las empresas han dicho ‘basta'.
La decisión, que ya es firme, será comunicada en las próximas horas a los ayuntamientos. Aseguran sus impulsores que no tendrá marcha atrás. «No se trata de meter presión a los consistorios –explica a este diario uno de los responsables de estas empresas–, sino de retirarnos de una actividad que no nos reporta ningún beneficio».
El sector de la maquinaria agrícola ha sufrido, como tantos otros, los demoledores efectos causados por la pandemia de coronavirus, con un retroceso importante en la venta de toda clase de productos. Ello también puede haber influido a la hora de desanimar a los responsables de las empresas vendedoras que, según lamentan públicamente, hace tiempo que no reciben «ni un solo gesto» por parte de la Administración. «Antiguamente –explican– éramos una parte importante de las ferias, se nos tenía en cuenta y ganábamos visibilidad, mientras que en los últimos tiempos parece que hasta tenemos que dar las gracias por estar allí». De hecho, algún alcalde ha llegado a pedir dinero para poder exponer los tractores, algo que solo ha servido para echar más leña al fuego del descontento entre unos empresarios que han dejado de creer en las ferias como medio para promocionar sus productos.
Cuestionados respecto a si existe el temor a que algún ‘esquirol' ocupe en esas ferias más inminentes el enorme hueco dejado por el grueso del sector, los responsables de las empresas se muestran tranquilos al respecto. En primer lugar, porque –aseguran- «vamos todos a una», y además porque –insisten– «llevar maquinaria a las ferias solo sirve para perder el tiempo y el dinero».
Así pues, para descubrir lo último del sector, ya lo sabe: desde ahora, en internet o recorriendo los diversos concesionarios de Mallorca.