Alrededor de 200 vecinos de la Colònia de Sant Pere (Artà) se concentraron este lunes frente a la Unidad Básica de Salud de la zona costera para exigir al Govern la restitución del servicio médico, suprimido el pasado día 5 de agosto tras dos bajas del personal sanitario. La decisión ha generado mucha indignación entre los residentes, a los que no queda otra opción que tener que desplazarse hasta el centro de salud de Artà, ubicado a 14 kilómetros.
La convocatoria para la concentración se hizo ayer casi de forma espontánea a través de whatsapp y la respuesta vecinal fue contundente. El presidente de la Asociación de Personas Mayores, Antoni Moragues, explicó a Ultima Hora su preocupación ante este anuncio de la Conselleria de Salut: «Somos el colectivo más sensible. Los mayores tenemos más dificultades de movilidad aunque afecte a todos los sectores de población. Poco a poco nos han ido recortando los servicios. Primero fueron los bancos, luego la policía y ahora nos quitan a los médicos».
Moragues añadía que «cuando nos enteramos de esta supresión empezamos a movilizarnos». De hecho ayer eran muchos los vecinos que se iban acercando al centro sanitario cuando se enteraban de la protesta. Además se ha iniciado una recogida de firmas para solicitar, con carácter inmediato, la restitución de esta atención médica personalizada.
Los asistentes a la protesta hicieron un minuto de silencio en memoria, de manera irónica, de un servicio que ha desaparecido. Al acabar se pudieron oír algunas pitadas contra la decisión.
Un residente, Andreu Genovard, leyó un manifiesto en el que se dejaba constancia de la indignación vecinal. Apuntó, además, que la supresión se ha adoptado en pleno mes de agosto cuando la Colònia está en su momento de más alta ocupación con motivo de la temporada turística».
Dificultad
Esta decisión del Govern afecta el día a día de los vecinos que se han de desplazar hasta el centro de salud de Artà. Magdalena Cursach y Ramon Capó son un matrimonio que ha asistido este lunes a la concentración para mostrar su disconformidad. «Tenemos que llamar a un taxi para desplazarnos con lo que todo ello conlleva. Necesitamos que el médico vuelva a ofrecer sus servicios en la Colònia».
Por su parte, el delegado de la Colònia, Pep Borràs, señaló que «el Ajuntament no tiene competencia directa pero recibimos las quejas de los ciudadanos y las protestas se trasladarán a las autoridades competentes para que se pueda restablecer este servicio lo antes posible».
Fuentes de la Conselleria de Salut han explicado que «en Artà ha habido dos bajas médicas, una de larga duración y otra de un médico que ha renunciado. Ello ha trastocado todos los planes». Admitieron que «la situación no es fácil» y aseguraron que «estamos buscando una solución. Las bajas han trastocado todo el calendario veraniego».
Desde el Govern informaron que la Unidad Básica de Salud está abierta los lunes, jueves y viernes de 8 a 15 horas con una enfermera y un administrativo.