Después de permanecer cerrado sin interrupción desde el 1 de noviembre, el Tren de Sóller se prepara para volver a la actividad a partir del martes que viene, 1 de junio. Se trata de una situación sin precedentes para la historia del ferrocarril, una empresa que depende casi totalmente de la actividad turística aunque también es una concesión de transporte público.
Este jueves, operarios de la empresa pusieron de nuevo en marcha el tren para realizar el viaje de prueba y asegurarse de que no hay ningún problema en la línea. Una locomotora realizó el trayecto entre Sóller y Palma sin pasajeros. Otros operarios estuvieron dedicados a la limpieza y desinfección de los vagones para que todo esté a punto con todas las garantías de seguridad e higiene.
El tren tendrá de momento un horario limitado a cuatro frecuencias diarias. Entre Sóller i Palma se podrá viajar a las 9 de la mañana y las 17 horas, mientras que las salidas de Palma serán a las 10:30 y a las 18 horas.
La empresa informó que también se ampliarán los actuales horarios del tranvía. Según Oscar Mayol, presidente de la compañía, «ante un visible aumento de turistas se incrementarán los horarios entre Sóller y el Port ya que es un servicio muy demandado».
La puesta en marcha del tren supondrá que una parte de la plantilla que está en ERTE se incorpore a sus puestos. Según Mayol, «ahora con solo el servicio de tranvía tenemos unos 10 trabajadores, mientras que el arranque del tren supondrá reincorporar a medio centenar de operarios, en los talleres, trenes y tranvías, estaciones y oficinas».