Santa Margalida ha iniciado una intensa labor de restauración de elementos patrimoniales y etnológicos que forman parte de su Historia, con el fin de ponerlos en valor y convertirlos en un aliciente para atraer turismo cultural hasta el municipio. El Ajuntament de La Vila destinará a esta reconversión turística una subvención de 700.000 euros concedida por el Gobierno central en octubre de 2019 para paliar los efectos de la quiebra del touroperador Thomas Cook en aquellos destinos turísticos más afectados. Can Picafort fue uno de ellos.
El proyecto está impulsado por las áreas de Turisme y de Cultura i Patrimoni bajo el nombre de «Una volta per la història de Santa Margalida» e implica la puesta en valor de sus recursos paisajísticos, culturales y patrimoniales, así como la señalización de todos los itinerarios y elementos de interés existentes en Santa Margalida, Can Picafort y Son Serra. Un mapa turístico y unas audioguías en diversos idiomas permitirán al visitante esta inmersión cultural.
Cuatro ejes
Las acciones previstas se basan en varios ejes. El más transformador y notable es la restauración de numerosos elementos etnológicos: las torres de enfilación usadas por los submarinos para hacer prácticas de tiro, construidas a partir de 1941, en plena Segunda Guerra Mundial; los seis nidos de ametralladoras construidos a lo largo de la costa margalidana durante la Guerra Civil Española y que fueron abandonados a partir de 1950; una cantera de marés en Son Real que ha dejado a la vista uno de los oficios antaño arraigados a esta costa; y principalmente, se reemprenderá la excavación de la Necrópolis de Son Real, el mayor exponente de la huella de las civilizaciones primitivas en esta parte de la Isla. La última campaña, que se realizará del 30 de mayo al 2 de julio, supondrá el punto y final en las labores arqueológicas en las zonas donde hasta ahora no ha sido excavada.
Paralelamente a los trabajos de restauración, se ha realizado una limpieza y mejora de itinerarios, entre ellos, el Camí de la Mar de Son Serra de Marina y todos los caminos municipales que atraviesan los itinerarios turísticos. En cada elemento de interés habrá un poste con un código QR con el que se podrá acceder a las audioguías y conocer la historia que cuentan cada uno de ellos.
Otro de los ejes para cumplir el objetivo de convertir el municipio en un destino turístico diferenciado es el arte. Con esta subvención de la Secretaría de Estadi de Turismo, el Ajuntament de Santa Margalida ha adquirido distintas esculturas para colocarlas en puntos estratégicos del municipio; en la línea de los conjuntos de esculturas del artista Joan Bennàssar que desde hace unos veranos se pueden ver sobre las rocas en Can Picafort.
Y finalmente, el proyecto incluye la convocatoria de un festival de arte urbano, como el que antes de la Covid-19 realizaba cada año a finales de verano el artista muralista Joan Aguiló. Las obras realizadas por los artistas que han participado en las distintas ediciones no pasan desapercibidas al dar un paseo por este núcleo turístico que quiere añadir la cultura, al sol y mar.