Son Coletes volvió a vivir una jornada de emoción. Este año, tras la ausencia del acto del 2020, el homenaje a las víctimas de la represión franquista estuvo marcado por las recientes excavaciones y el hallazgo de 18 restos humanos. «Hemos descubierto la dimensión del sufrimiento. Una vergüenza oculta debajo de tres metros de tierra y cal» señaló la portavoz del Comité de Son Coletes, en Manacor.
El acto desarrollado con las medidas sanitarias pertinentes este año se celebró en la explanada de entrada al recinto. La lectura del manifiesto fue a cargo de la glosadora manacorina Maribel Servera. En su texto versado Servera indicó que se debe seguir buscando las personas que aún quedan por hallar. También criticó la promoción de la violencia que se hace desde la extrema derecha y a los «lladregots dels Borbons».
Finalmente hizo un llamamiento a ejercer el «republicanismo para terminar con el fascismo y hacer un mundo mejor».
En el homenaje se vio al alcalde de Manacor, Miquel Oliver, junto a algunos de los regidores que conforman el equipo de gobierno.
El grupo musical Vers Endins fueron los encargados de poner las notas musicales al acto junto a la flautista Maria Àngela Riera que interpretó el Cant dels Ocells.
Este año debido a las medidas solo participo un representante de los familiares, fue Pere Guiscafrè que leyó un poema compuesto por el mismo para recordar a sus familiares y a todas las víctimas del franquismo.
Este año entre todos los nombre de los represaliados se destacaron los de Antoni Alomar y Francesca Llull y Francesca Sales, madre e hija que son las tres víctimas identificadas tras las recientes excavaciones de hace unos meses en Son Coletes.