Cada vez está más cerca que tanto Ariany como Petra puedan disponer de agua potable. La Conselleria de Medi Ambient del Govern balear conectará a finales de este año ambos municipios con el acuífero de sa Marineta y las desaladoras.
El gerente de l'Agència Balear de l'Aigua i Qualitat Ambiental (Abaqua), Guillem Rosselló, explicó a este periódico que «ya se han ejecutado el 80 por ciento de las obras de canalización desde Maria de la Salut hasta Petra y se ha construido un ramal hasta Ariany». Las previsiones son de terminar las actuaciones en septiembre u octubre y después conectar la instalación para poder suministrar agua de calidad a estos municipios antes de finales de año. Las actuaciones que quedan ahora son las de cruzar carreteras o torrentes «que se dejan para el final porque son las más complicadas», según Rosselló.
Sobre la construcción de los depósitos necesarios, Rosselló apunto que el de Petra ya está listo, mientras que el de Maria de la Salut se está construyendo actualmente. El depósito regulador de Petra tiene una capacidad de 1.920 metros cúbicos, mientras que el de Maria es de 6.000 metros cúbicos. En este último también habrá un edificio de control desde donde arranca la conducción principal de 600 milímetros de diámetro que se conectará a otra ya instalada.
La siguiente fase de este proyecto será el de sacar a concurso la licitación para continuar la canalización de agua en alta hasta el municipio de Manacor. En esta localidad, el Ajuntament también ha previsto la inversión de cinco millones de euros que provienen del superávit municipal para construir una planta potabilizadora. La intención del Consistorio es utilizar el agua de sa Marineta cuando el suministro municipal no sea suficiente.
Todas estas actuaciones que lleva a cabo la Conselleria de Medi Ambient tienen el objetivo final de conseguir tener conectados todos los municipios de Mallorca para que puedan recibir agua de las desaladoras, además de la fuente de sa Costera y los acuíferos de sa Marineta y s'Estremera. Guillem Rosselló dijo que «la intención de futuro es que se pueda ofrecer un suministro de agua de calidad desde cualquier punto de abastecimiento de Mallorca».
Con esta obra, que no será inminente, se pondrá fin a las reclamaciones de varios municipios del Pla que llevan años reclamando poder conectarse a la tubería de sa Marineta para mejorar la calidad del agua y bajar los niveles de nitratos que provocan que el líquido no sea apto para el consumo.
De hecho, recientemente, el PP ha vuelto a sacar a la palestra la falta de agua de calidad en Sineu y Lloret, por ejemplo. Ya en el año 2017, la Mancomunitat del Pla volvió a pedir que todos los municipios se pudieron conectar a la red de agua en alta y abastecerse de las desaladoras. Esta reclamación es histórica y, hasta el momento, no ha sido posible debido a la falta de financiamiento. La obra de repartir tuberías por los pueblos sería de 16 millones.