El Pla de Mallorca amaneció este lunes, Día de los Inocentes, prácticamente impoluto, sin rastro de las tradicionales inocentadas que los Quintos hacen tradicionalmente en pueblos como Sant Joan, Montuïri, Petra, Sineu o Lloret, cada año.
Solo en Maria de la Salut los Quintos esparcieron fardos de paja, tiraron petardos y dejaron un ‘cabrón' en el recinto de la antigua guardería, todo ello «antes del toque de queda de las 22 horas», dijo el alcalde Bernat Quetglas.
Visto y no visto
Quetglas explicó que la empresa concesionaria de la limpieza viaria se encargó de limpiar la suciedad de las calles a primera hora de la mañana por lo que antes de las 10 horas ya solo quedaba algún rastro de paja en las calles esparcido por el viento. «Buscaremos al dueño del animal para devolvérselo», dijo el alcalde Quetglas.