un total de 707 titulares de autorizaciones temporales para el uso de amarres en base deben solicitar, antes del día 31 de diciembre, una nueva autorización si no quieren perder sus derechos de uso. Los afectados son los de los puertos de Cala Bona, Cala Figuera, Cala Rajada, Porto Cristo, Portopetro y Sóller.
La ley establece que cada tres años los titulares están obligados, expresamente, sin necesidad de previo aviso, a pedir la renovación del permiso de los amarres.
Ports de les Illes informa que han de renovar 52 titulares de Cala Bona; 40 del puerto de Cala Figuera; 11 de Cala Rajada; 199 de Porto Cristo; 9 de Portopetro y 396 del Port de Sóller.
Desde el Govern informan que como medida sanitaria preventiva a partir del 1 de noviembre, coincidiendo con la abertura de la nueva sede electrónica de Ports IB, los usuarios podrán realizar este trámite de manera telemática. En el caso de no ejercer su derecho se perderá automáticamente la plaza.