Ni por Santa Càndida ni por Sant Miquel los Cavallets Cotoners de Llucmajor podrán celebrar este año el 20 aniversario de su puesta en marcha.
La primera actuación de esta agrupación de los Cavallets se llevó a cabo el 13 de agosto del 2000. Fue un acto multitudinario. Por primera vez integraban a niños y niñas en las fiestas patronales. Aquel día los Cavallets, acompañados por la banda de música local, despertaron un gran interés. Nuevos bailes, nuevas danzas, nuevos vestidos y nueva tradición.
Ahora, veinte años después, se ‘celebra' su aniversario con una realidad muy diferente. El coronavirus ha hecho que se haya tenido que cancelar no solo la celebración sino también el homenaje que se hubiera rendido a estos 20 años de tradición.
Tòfol Barros, actual organista de la Parròquia de Sant Miquel y que en el año 2000 era subdirector de la banda, explica que «el primer año que los Cavallets actuaron lo hicieron empleando las danzas de los Cavallets d'Artà»: sa Carrossa y los Indis». Pero en el año 2001, y entendiendo el Consistorio que los Cavallets de Llucmajor debían tener unas danzas propias, encomendaron la tarea a mestre Miquel Janer y a Tòfol Barros para que crearan una danzas propias de la localidad. Así ambos crearon las actuales melodías.
Tras 20 años los bailes de figuras de los Cavallets de la ciudad vuelven a ser motivo de orgullo. Creados como vehículo para la participación de los más pequeños, han supuesto un vínculo cultural entre las nuevas generaciones y las tradiciones más antiguas del municipio.