La cosecha de este año de aceituna de mesa mallorquina con Denominación de Origen está previsto que caiga un 80 por ciento en comparación con la de la anterior campaña, en la que se recogieron 35.716 kilos, informó la asociación de productores.
Los olivicultores de la Denominación de Origen Protegida Oliva de Mallorca, que comienzan estos días la cosecha de la campaña de este año, han indicado en una nota que esa caída ha sido causada por el hecho de que a la tradicional presencia de la mosca del olivo en época de floración se ha sumado la aparición de la polilla del olivo (Prays olellus), que provoca una notable pérdida de flor.
También ha perjudicado la cosecha la granizada que acompañó a la tormenta del pasado 29 de agosto, de nefastas consecuencias para muchos olivicultores que han perdido la producción de aceituna de mesa en su totalidad.
Los olivicultores de la denominación de Origen Protegida, la mayor parte con olivos en la Serra de la Tramuntana, han asegurado de que a pesar de estas previsiones de cosecha reducida, el abastecimiento de Oliva de Mallorca a establecimientos está garantizado.
Estas primeras semanas, los trabajos se centran en la recolección de los frutos para elaborar aceituna verde entera para, a continuación, hacerlo con la destinada a partir (trencada) pero la campaña no se cerrará hasta entrado 2021, hacia la Semana Santa, con la cosecha de la aceituna negra, que será «muy poca» o casi nula, han precisado fuentes de la asociación de productores.
Con la finalidad de preservar el cultivo de la oliva tradicional de Mallorca y frenar el abandono de los olivares, la Denominación de Origen Protegida Oliva ampara a más de 77.000 olivos antiguos, muchos de ellos varias veces centenarios-
Unos noventa productores con olivares de montaña trabajan de forma casi artesanal para ofrecer al consumidor aceituna de mesa de la variedad autóctona mallorquina con todas las garantías, tanto de calidad como de procedencia.