Restos de seis cadáveres con vestimenta militar, posiblemente de milicianos republicanos embarcados en Barcelona en agosto de 1936 para tratar de reconquistar Mallorca, han sido localizados en las excavaciones que se llevan a cabo en el cementerio de Son Coletes de Manacor.
Según ha informado el Govern balear, que impulsa las tareas de exhumación de combatientes y represaliados enterrados en fosas del cementerio de Manacor, aunque aún no están identificados, estos restos confirman el entierro en Son Coletes de milicianos al mando del capitán Alberto Bayo, que dirigió la expedición que desembarcó el 16 de agosto en las costas del Llevant de Mallorca para combatir contra las tropas sublevadas que se habían hecho con el control de la isla.
El secretario autonómico de Memoria Democrática de Baleares, Jesús Jurado, y la directora general de la misma área en la Generalitat de Catalunya, Gemma Domènech, han visitado esta mañana Son Coletes para conocer los hallazgos de los investigadores que trabajan en la exhumación.
La disposición de los cuerpos encontrados junto a insignias, hebillas y botas militares difiere de la del resto de cadávere3s localizados en otras zanjas. Están a menos profundidad y más amontonados.
«Las investigaciones de los historiadores apuntan que en Son Coletes podría haber enterrados, como mínimo, unos cincuenta milicianos y milicianas de las tropas de Bayo.
Según la información disponible, habría habido dos momentos de entierros masivos de milicianos en Son Coletes: los que fueron tomados como prisioneros la noche del 31 de agosto al 1 de septiembre y, posteriormente, un número indeterminado de milicianos y milicianas capturados el 4 de septiembre en Porto Cristo, Sa Coma, alrededores de Manacor, Sant Llorenç y Son Servera», explica el Govern.
Los gobiernos de Baleares y Cataluña colaboran en esta intervención para la recuperación de cuerpos de combatientes y represaliados con el propósito de localizar a familiares catalanes de algunas de las personas que fueron dadas por desaparecidas en conocido como «desembarco de Bayo».
La Generalitat tiene localizados a una veintena de familiares vivos de las víctimas de aquel episodio de la Guerra Civil y ha iniciado el proceso de recogida de muestras de ADN para compararlo con los restos genéticos que puedan obtenerse de los huesos que se encuentren en Son Coletes y otros puntos de Mallorca donde fueron enterradas víctimas de combates y fusilamientos.
«La búsqueda se está llevando a cabo contactando con los municipios de procedencia de las víctimas que hasta ahora han podido ser documentadas y que, de momento, son 192. La Dirección General ha hecho llegar a más de 80 ayuntamientos y entidades locales de todo el Estado, los nombres, las direcciones donde vivían y, en caso de disponer de ellos, datos de familiares», indica el ejecutivo balear. EFE