La antigua fábrica de Can Ballester, situada en la avenida de Lluc de Inca, se convertirá en un hotel urbano enfocado al cicloturismo en la Serra.
El promotor alemán Matthias Meindel es el impulsor del Hotel de Ciutat Tramuntana, un establecimiento único en Inca que «aprovechará las buenas conexiones que tiene el municipio y su situación privilegiada, junto a muchas de las rutas ciclistas y excursionistas de la Serra», según comenta Meindel.
En el proyecto elaborado por los arquitectos Miquel Reynés y Melsion Martí, de Escaire Arquitectura, se ha planteado un hotel de carácter urbano con 10 habitaciones y veinte plazas. Para ello se reformará el interior de la fábrica se construirá una planta más para que llegue a las tres alturas. En la planta noble se instalará un bar, un taller y un aparcamiento para las bicicletas. Matthias Meindel cree que «será una opción muy atractiva para los turistas que quieran pasar sus vacaciones sin coche y opten por transportes más ecológicos como el tren».
Hoja de ruta
El promotor ya ha solicitado la licencia de obras al Ajuntament d'Inca y prevé que el establecimiento hotelero abra en primavera de 2022, «si todo va como tenemos previsto».
La automatización del hotel urbano Tramuntana será muy alta, con el objetivo de facilitar la entrada y salida de los huéspedes a cualquier hora, por lo que el establecimiento podría funcionar con dos trabajadores. La tipología de los clientes que se prevén en el hotel, procedentes de Alemania y Austria principalmente, hace pensar en que optarán por estancias largas.
Para el diseño de la fachada, Escaire Arquitectura ha optado por una estética sobria y práctica, que no desentone con el entorno urbano de la avenida de Lluc y que mantenga un carácter mediterráneo. El hotel contará con un sistema de placas solares fotovoltaicas para obtener energía y contará con el certificado de eficiencia energética.
El Hotel de Ciutat Tramuntana será el segundo que abrirá en la ciudad
El proyecto del Hotel de Ciutat Tramuntana se une a otro cuyas obras ya están en marcha en Inca y que se ubicará en el antiguo Forn de Can Guixe. En este caso se trata de un establecimiento enfocado a los visitantes de negocios que se aprovechará su situación en el centro