El Govern iniciará este martes, día 14 de julio, los trabajos de exhumación de la fosa de Son Coletes de Manacor, una de las mayores de la guerra civil en las Islas. Una treintena de familiares de las víctimas conocieron ayer, en el centro cívico de Son Macià, en que consistirán estos trabajos de excavación para localizar restos de las víctimas de la represión franquista. Se trata de una exhumación complicada que se hace rodeada de mucha incertidumbre por las características de la fosa y porque se desconoce si se podrán encontrar o no los restos.
La Consellera d'Administracions Públiques, Isabel Castro, el Secretari de Memòria Democràtica, Jesús Jurado junto con el director general de Memòria Democràtica, Marc Herrera; el alcalde de Manacor, Miquel Oliver, el historiador Antoni Tugores y representantes de la empresa ATICS, que llevará a cabo los trabajos, pidieron «prudencia» para no crear «falsas expectativas». Sin embargo todos coincidieron en destacar que «hay una esperanza y que por ello se agotarán todas las posibilidades de encontrar los restos».
El proyecto de intervención se ha hecho a partir del estudio de una fotografía aérea realizada por la aviación de los Estados Unidos entre 1942-1945, facilitada por la UIB, que ha permitido determinar que tras los asesinatos de 1936 el antiguo cementerio de Son Coletes presentaba una planta completamente cuadrada y en el centro había una cruz de hierro. Los enterramientos se habrían realizados en zanjas, partiendo del centro, en linea recta y de una forma radial.
Según explicó Cesc Busquet, arqueólogo de ATICS «a partir de aquí se han establecido 5 zonas para excavar el subsuelo del cementerio y poder establecer los límites de los enterramientos de los represaliados. Son zonas donde se intuyen los enterramientos a partir de la fotografía aérea».
El historiador Antoni Tugores explicó que «no se saben cuantos puede haber, supuestamente centenares». Habló de «entre 200-250, aunque algunos incluso cifraron en 700 víctimas. Lo que es cierto es que no sabemos cuantos hay ni si se podrán encontrar».
La Consellera Castro destacó que «lo que importa es el hecho, la justicia restaurada, la restitución de la verdad y la reparación , en la medida de lo posible, del mal causado».
Testimonios
Los familiares de las víctimas necesitan esta reparación. Tolita Riera y Ana Maria Garau buscan a sus abuelos Toni Alomar y Margalida Jaume. Estas primas contaron que «se llevaron a nuestro abuelo, que era relojero de Manacor y después a su mujer que estaba embarazada de siete meses. Nuestras madres de 11 y 8 años se despertaron y estaban solas». Una de las hijas tiene 92 años y su máxima ilusión, según explicaron, sería poder encontrarlos. «Hemos esperado mucho pero esperemos que lleguemos todavía a tiempo».
Otro de los testimonios es el de Joan Bibiloni que busca a su padrino. «Al hermano de mi madre lo vinieron a buscar, yo tenía entonces 4 años. Cuando tenía 20 años también mataron al padre de mi mujer. Ojalá pudiéramos encontrarlos».