Un grupo de ocho jóvenes de la Part Forana se encuentra atrapado en Filipinas, junto a cincuenta turistas españoles, sin poder regresar a España por culpa de las cancelaciones de vuelos internacionales a causa del COVID-19.
La poblera Caterina Cardell ha sido la portavoz en las redes sociales de este grupo de amigos que proceden también de Inca (5), Búger y Ariany. Caterina explica que «cuando nos enteramos de las restricciones nos pusimos en contacto con el consulado español en Manila, que lo único que nos dijo es que nos desplazáramos a una ciudad con aeropuerto internacional y que buscáramos un vuelo, porque tampoco podíamos acceder a Manila. Ya nos habían anulado el vuelo de vuelta que teníamos para el martes».
Finalmente lograron adquirir un vuelo con escalas de regreso hasta Barcelona para este jueves, «que nos ha costado más de mil euros a cada uno y que aún no sabemos si se cancelará, porque las anulaciones siguen siendo constantes». También les preocupa «que nos hagan hacer cuarentena en alguna de las escalas».
A pesar de la situación, el grupo se considera afortunado por el momento, «porque hay más turistas españoles que se encuentran en la misma situación y no han conseguido un vuelo». Solicitan al gobierno «que facilite la salida de españoles que estén en Filipinas» y piden a las compañías aéreas «que no se aprovechen de esta situación para poner unos precios tan desorbitados».
Pero este grupo de jóvenes no son los únicos mallorquines ‘atrapados' en diferentes países. Carla Verónica Campanella, argentina residente en Mallorca, y José Antonio Pérez Blanco, de Marratxí, afrontan una complicada situación en India, adonde llegaron hace 23 días con la intención de recorrer todo el subcontinente asiático. Ya habían visitado Rajastán y Kerala, y hasta ayer no tuvieron noticia del estado de alarma decretado en España porque se hallaban en la isla Havelock, oficialmente Swaraj, la mayor del archipiélago de Andaman sin conexión posible con internet.
Vuelo a Calcuta
En la mañana de este miércoles, una vez en Port Blair, capital del distrito, han decidido interrumpir su viaje siguiendo las recomendaciones del Gobierno español y regresar a Mallorca, y su objetivo prioritario es poder encontrar plaza en algún vuelo que les lleve a Calcuta, desde cuyo aeropuerto internacional intentarán encontrar la manera de regresar a Europa. «No podemos quedarnos aquí porque ahora mismo en algunos lugares, como en Kerala, están obligando a todos los turistas a cumplir cuarentena», señala Jose, y añade que «tenemos miedo de que si no regresamos ya, después nos veremos obligados a quedarnos mucho más tiempo, y si tenemos que coger el coronavirus, preferimos que sea en España y no aquí». Para complicar aún más la situación, algunos hoteles se niegan a acoger a turistas por miedo al contagio y la India ha decidido también cerrar fronteras, y las compañías aéreas nacionales están cancelando vuelos.
Otra mallorquina, Marian Tous, explicaba a través de las redes sociales su confinamiento en Vietnam después que su compañera tuviera fiebre y acudieran a un hospital.