Después de doce años con las obras paralizadas, el Ajuntament de Manacor ha concedido las licencias de obras necesarias para terminar 45 de las 189 viviendas unifamiliares que se proyectaron en s'Entany den Mas, en Cala Romàntica, y cuya construcción se paralizó hace más de una década tras la quiebra de la empresa promotora.
Muchas de estas viviendas ya estaban en la fase final de su construcción y ahora se ha solicitado terminar parte de la polémica urbanización. El Consistorio ha concedido las licencias solicitadas «porque todo es legal», según fuentes municipales.
Aunque algunas voces dudan de esta legalidad y apuntan a la restricción de la nueva normativa urbanística que se rige con el Plan General d'Ordenació Urbana (PGOU), según pudo saber este periódico el PGOU no afecta a la zona en la que se levantan las casi 200 viviendas.
Desde el año 2008, esta zona urbana de s'Estany den Mas parece una urbanización fantasma. Poco después de paralizarse las obras se produjeron una serie de actos vandálicos y la propiedad puso vigilancia las 24 horas del día para impedir que se destrozaran las casas, algunas de las cuales ya contaban incluso con la carpintería, muestra de su avanzado estado de construcción.
Ya hace diez años, el Grup d'Ornitologia Balear (GOB) denunció la construcción de estas 185 viviendas unifamiliares y tildó la urbanización de atentado ecológico y un vertedero de 11 hectáreas que se encuentra muy cerca de la desembocadura de un torrente. Tras el paso de los años, una parte de estas construcciones se reactiva para terminar los chalets.