Indignación en la comarca del Llevant tras conocer la resolución de Costas sobre las ayudas para reparar los daños causados por la borrasca ‘Gloria'. Los alcaldes o responsables de Turisme han mostrado su «incredulidad», «decepción» o «sorpresa» ante el anuncio del Ministerio para la Transición Ecológica que cifra en 4,4 millones las ayudas para todo Balears además de no incluir la regeneración de las playas ni los paseos marítimos destrozados. Todos ellos lo consideran una inversión insuficiente y han mostrado su preocupación, sobretodo a las puertas del inicio de la temporada turística.
Rafel Fernández, alcalde de Capdepera, manifestó que «solo en nuestro municipio hemos valorado en 4 millones de euros los daños causados, que es lo que han dejado para todo Balears. Ya se puede ver la intencionalidad del gobierno. Estamos muy decepcionados de esta inversión que demuestra muy poca sensibilidad con las zonas turísticas, ahora bien si que quieren cobrar el IVA».
La presidenta del consorcio de Cala Millor, Marga Vives, que aglutina los ayuntamientos de Sant Llorenç y Son Servera además de los hoteleros, expuso que «es una muy mala noticia que afectará directamente a la industria turística próxima a la zonas de playa sin arena y a la imagen de nuestro destino. Nos sitúa ante un calendario que aún cumpliendo los requisitos exigidos no se podrá actuar antes de tres meses». Por ello, según expone, «desde los ayuntamientos se procederá de manera urgente a la limpieza y retirada de las piedras, además de reparaciones y reconstrucción de las instalaciones dañadas y todo ello se hará con fondos municipales».
En Felanitx, el alcalde Jaume Monserrat, mostró su sorpresa por la decisión de Costas. «La verdad es que nos ha cogido con asombro. Estamos muy sorprendidos. ¿Ellos se ofrecieron y después se retractan?» Monserrat añade que «la próxima semana tenemos una reunión con Costas y veremos que nos dicen». Además, el Ajuntament mantendrá otra reunión con las concesionarias de las playas para atajar las soluciones.
El alcalde de Manacor, Miquel Oliver, se mostró ayer indignado y aseguró que «protestaremos mucho». Oliver no entiende que no se arreglen los paseos que son competencia de Costas. «El Ajuntament no puede hacer frente a la reforma del paseo de Cales de Mallorca, que es el más dañado. Es una situación dramática, sobre todo por la inminente llegada de la temporada turística».