El contundente comunicado emitido el miércoles por el consejo de administración del Tren de Sóller en el que informa al accionariado que «10 de los 11 miembros del consejo, que poseen o representan el 57,33 por ciento de las acciones de la sociedad, rechazan de forma explícita la oferta de compra», no impedirá que el grupo de inversores que quiere comprar el tren siga intentando comprar el máximo número posible de títulos hasta que finalice el plazo de la OPA.
Así lo notificó Goros Invest S.L., la entidad que representada a la sociedad Mundra Invest constituida hace unos meses por este grupo de inversores del que hasta ahora solamente han trascendido los nombres de Mar Raventós y de Lluís Rullan Colom, a pesar de que la nota del consejo del tren impide matemáticamente que se pueda conseguir el objetivo que persiguen de hacerse con el 50,01 %.
Goros Invest afirmó este miércoles por la tarde en un breve comunicado que todavía no había recibido del Consejo de Administración de Ferrocarril de Sóller «ninguna respuesta, ni positiva ni negativa, a su oferta de compra de las acciones» dando a entender que la única información del «rechazo expreso» les había llegado a través de los medios de comunicación.
En este sentido, Goros afirmaba que estaba «revisando la información conocida a través de los medios» y que en todo caso agotarían el plazo dado a los titulares de acciones para decidir la venta de sus acciones. Recuerdan que este plazo «concluye el próximo viernes día 6 de septiembre a las catorce horas». Una portavoz de Goros aseguraba que la empresa intermediaria que representa a Mundra S.L. -formada por Juan M. Goenechea y Xavier de Ros Raventós- «no se pronunciará sobre lo ocurrido en este proceso hasta que concluya el plazo de la oferta».
Según el presidente del Ferrocarril de Sóller, Óscar Mayol, «la oferta de compra ha decaído ya que es imposible que se cumpla la principal condición para llevarla a cabo».