Los resultados de las primeras analíticas realizadas por la Conselleria de Medi Ambient sobre los componentes hallados en el vertido de la antigua fábrica de colchones de Montuïri ha dado resultados negativos. Pese a ello, el Govern mantiene la prohibición a los vecinos de usar el agua de los pozos.
La analítica se ha realizado a 149 compuestos químicos y ha descartado la ecotoxicidad del agua del pozo que hay en el edificio. Todos los compuestos se encuentran por debajo el límite de detección, con la excepción de ocho compuestos de la familia de los polioles, que, si bien pueden causar irritación a la piel o a los ojos –concentrados y al manipularlos directamente- no aparecen calificados como cancerígenos o tóxicos graves. El resultado de la analítica, según Medi Ambient, significa que no afecta el medio ambiente ni a los animales.
Así se lo explicaron este martes a los vecinos el director general de Residus i Educació Ambiental, Sebastià Sansó, y su homóloga de Recursos Hídrics, Joana Garau, junto al alcalde Joan Verger. En la reunión también estuvieron presentes técnicos del GOB invitados por los vecinos.
El líquido que se ha extraído del interior del pozo alcanza las 37 toneladas. Una parte se ha almacenado y precintado en depósitos y el resto, los Bombers de Mallorca lo trasvasaron a depósitos de la fábrica tras comprobar su buen estado.