El sindicato CCOO de Construcción y Servicios ha organizado una asamblea para este martes por la tarde para decidir si finalmente se aprueba la huelga indefinida que afectaría a más de 3.000 trabajadores de la limpieza y recogida de residuos.
El 22 de agosto ha sido la fecha de inicio elegida, pero esperan poder llegar a un acuerdo con la patronal del sector (ASELIP) para que esta acepte la aprobación de un convenio autonómico. Con ello se pretende conseguir un sueldo digno para los trabajadores, además de mejoras en cuanto a la prevención de riesgos y salud. Muchos de ellos no alcanzan los 900 euros del salario mínimo interprofesional. Se trata de una huelga que afectaría sobre todo a los municipios del litoral, que en esta época del año concentran más personas.
El secretario general de CCOO de Construcción y Servicios de Baleares, Miguel Pardo, asegura que «hablamos de un sector verdaderamente precarizado en la isla. En Menorca y Formentera al menos cuentan con convenios más o menos regulados». Tanto trabajadores como ayuntamientos prefieren llegar a un acuerdo, Pardo asegura que «todos queremos evitar la huelga, pero si no se llega a un acuerdo es la única solución». En caso de que se aprobara este martes, los ayuntamientos serían preavisados el día nueve, antes de su comienzo.
Los turoperadores y hoteleros se muestran preocupados por la falta de limpieza que esto acarreará en las zonas turísticas. Para evitar presiones y facilitar el entendimiento se solicitará la intervención de la Conselleria de Treball.
Implicados
La huelga quiere convocarse en las cuatro empresas responsables de estos servicios en los municipios de la isla. De momento, la única de ellas que ha aceptado sentarse para negociar ha sido Melchor Mascaró. Cabe destacar que Palma y Calvià quedarían exentos de la huelga al contar con empresas municipales propias para el saneamiento.