El cadáver de una tortuga marina de la especie Caretta caretta, conocida por la denominación de tortuga boba y considerada como vulnerable en el Catálogo Balear de Especies Amenazadas, ha aparecido este martes en la playa de Canyamel.
El Ayuntamiento de Capdepera ha informado este viernes en una nota de prensa de que el Servicio de Salvamento comunicó el hallazgo a la Fundación Palma Aquarium, actual entidad responsable de la recuperación y monitoreo de las tortugas marinas en Baleares, y que esta envió a uno de sus técnicos para su retirada y posterior análisis.
El animal era una ejemplar relativamente adulto de esta especie que es común en el Mediterráneo.
La autopsia permitirá conocer la causa definitiva de su muerte, aunque el especialista ha remarcado que las tortugas marinas soportan habitualmente «todo un cúmulo de factores negativos en su supervivencia, como heridas por artes de pesca o embarcaciones, ingesta de plásticos y cuerpos extraños y enfermedades que combinados, acaban provocando su muerte».
El consistorio ha recordado que en caso de encontrar alguna tortuga o cualquier otro animal marino se comunique al Servicio de Salvamento de la playa o directamente al 112, para que los técnicos especialistas puedan hacerse cargo de la situación.