Los agentes de Medi Ambient denunciaron este viernes a través de las redes sociales de la entrada no autorizada de un grupo de espeleobuceadores extranjeros en una cueva declarada Zona de Especial Conservación (ZEC), dentro de la Red Natura 2000. En concreto, se trata de la cueva des Drac en el municipio de Santanyí que, según explicó el presidente de la Federación Balear de Espeleología, Guillem Mulet, es una cueva de fácil acceso y es habitual encontrar personas que se acercan a la cavidad.
La inmersión en este tipo de cuevas declaradas ZEC está regulada por el Govern, por lo que cualquier espeleólogo interesado en bucear en la cavidad debe solicitar permiso previamente a la Conselleria de Medi Ambient i Agricultura. Precisamente, en la página web de Red Natura destacan que las cavidades de Baleares sufren el impacto de visitas no reguladas que pueden provocar problemas locales de contaminación como vertidos de residuos, molestias a la fauna y el deterioro de las formaciones cársticas. «La contaminación de los acuíferos es una amenaza potencial para los troglobios acuáticos», añaden.
El presidente de la Federación de Espeleología lamenta que se den este tipo de situaciones ya que es difícil controlar qué tipo de actividades se realizan en las cuevas. «En algunos casos se ha sabido de empresas extranjeras que realizaban excursiones en las cuevas», denuncia.
Guillem Mulet critica también las demoras de la Conselleria en tramitar los permisos de espeleobuceo. «La burocracia administrativa hace que nosotros tengamos de presentar el proyecto de estudio o exploración, pero Medi Ambient tarda meses en responder si nos concede o no dicho permiso», denuncia mientras recuerda que la agilidad es fundamental «ya que sino muchos se saltan la legalidad».
En la Isla hay unas 30 cuevas dentro de zonas protegidas como LEC. La más importante, tal vez por su extensión, es la cueva des Pas de Vallgornera, que cuenta con una puerta de acceso a la cavidad que controla Medi Ambient. En el caso de la de Santanyí, este es libre.