Aunque este fin de semana haya llovido en el Valle, el sector olivarero de Sóller y Fornalutx está «muy preocupado» por el grave déficit de lluvias que se arrastra durante buena parte del invierno y toda la primavera.
Desde la Cooperativa San Bartomeu se ha destacado que la situación «hoy por hoy, es preocupante pero todavía no alarmante siempre que llueva pronto y lo haga con la suficiente abundancia como para asegurar las reservas de agua que el olivar necesita para aguantar el que queda de primavera y la canícula estival.
Según los datos de campo recogidos por los técnicos de la entidad agraria, en estos momentos el olivar se encuentra en el valle «en plena floración, pero con diferentes estadios dependiendo de la zona». Así en algunos puntos está a punto de abrir se la flor y en otros ya hay oliveta recién cuajada.
También se ha observado que en algunas zonas del Valle, por ejemplo en la zona de Els Marroigs la sequía agraria ha sido menor que en otras.
En todo caso los próximos «15 o 20 días serán claves para saber si la cosecha sufrirá las consecuencias o se salvará. A finales de junio se podrá hacer un diagnóstico» asegura Margalida Morey, técnica de la Cooperativa de Sóller. Recuerda que la pasada temporada fue «la peor que se recuerda en el Valle», por lo que otra año sin aceitunas sería «muy perjudicial para el sector».
En cuanto a la presencia de mosca de momento no se ha detectado el insecto pero está previsto empezar a muestrear durante la próxima semana.