La delicada situación del sector lácteo en Mallorca se agrava año tras año. Según los datos del Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA) el año pasado la producción de leche en Baleares disminuyó en un 7 %. La razón principal es el cierre de explotaciones ganaderas en Mallorca, una constante que se acentúa año tras año. En una década se ha pasado de 42 vaquerías en la Isla a las 19 actuales, una realidad que según la gerente ejecutiva de UPA, Joana Mascaró, se debe a que no hay un relevo generacional que garantice la continuidad de la producción.
«La mayoría de ganaderos están más cerca de los 65 años que de los 55, lo que significa que cuando uno se jubila no hay ganaderos jóvenes que tomen el testigo y continúen su trabajo en la explotación», lamenta Mascaró mientras recuerda que esta situación se da principalmente en Mallorca y no en Menorca, donde allí sí que hay jóvenes ganaderos en las explotaciones de vacas lecheras.
Así lo demuestran los datos de la Conselleria de Medi Ambient y Agricultura en sus datos públicos donde señalan que en 2017 en Mallorca había 29 explotaciones. En la actualidad, Mascaró constata que esta cifra se ha reducido a 19. La situación no es comparable con Menorca, ya que en la isla vecina el número de vaquerías ha aumentado de manera paulatina en la última década.
Producción
Según los datos del Fondo de Garantía Agraria, el año pasado en Baleares la producción de leche llegó a las 51.581 toneladas, lo que significa 3.830 menos que en 2017, debido a la disminución de la producción. La situación es generalizada en el Estado español donde el año pasado cerraron 809 granjas lácteas (3 al día), según denuncia la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), de la cual forma parte Joana Mascaró.
Desde la asociación agraria también lamentan la falta de precios justos para la leche que, el año pasado, en el conjunto del estado se mantuvo en 0,322 euros el litro, el mismo precio que se dio en 2017. En Mallorca, Mascaró recuerda que la nueva situación de Agama da «esperanzas» al sector. «Agama quiere hacer una inversión importante en su fábrica, por lo que nos garantiza la continuidad de compra de leche y eso es un paso muy importante para nosotros ya que da a entender que habrá continuidad», explica. Se calcula que Agama controla un 90 % de la producción que se genera en la Isla. De momento, comentan los ganaderos de Campos la empresa mantiene los precios del litro de leche.
Por otra parte, cabe señalar que la crisis de sector lácteo viene agravada por la falta de consumidores. Se calcula que solo entre el 8 % y el 10 % de la leche que se consume en Baleares procede de las vaquerías insulares. Campañas de consumo local son fundamentales para reactivar no solo la producción sino también el incremento de los precios que reciben los ganaderos.