Tras siete años de una frenética actividad de reformas hoteleras, las solicitudes de licencias urbanísticas para la realización de obras de mejora en establecimientos turísticos de Calvià cayeron casi a la mitad durante el año 2018 con respecto al ejercicio anterior.
Según datos facilitados por el departamento municipal de Urbanismo, durante el año pasado se solicitaron 17 permisos para la rehabilitación de 11 establecimientos hoteleros, mientras que en 2017 fueron 31 las licencias requeridas por un total de 26 compañías hoteleras, para ejecutar 14 proyectos de reforma, 15 de ampliación y la construcción de dos hoteles de nueva planta, entre ellos el cinco estrellas de la compañía Zafiro en Palmanova.
En este sentido, los permisos de obra solicitados en 2018 se cursaron para llevar a cabo 12 reformas, tres ampliaciones y dos demoliciones, una parcial y otra de anexos al establecimiento hotelero en cuestión.
En cuanto a las licencias urbanísticas concedidas en 2018, éstas ascendieron a 36 para 21 establecimientos hoteleros. De los 36 permisos, 18 correspondieron a reformas, 14 a ampliaciones, dos a construcciones de nueva planta y dos a demoliciones. En cuanto al año anterior, el número de permisos concedidos a 22 establecimientos se sitúo 32, con el objeto de ejecutar 15 proyectos de reforma y 17 de ampliación.
Más categoría
Desde el Ajuntament de Calvià apuntan que las licencias solicitadas y concedidas en un mismo año no tienen porqué coincidir, ya que algunas de las que se conceden han sido solicitadas en ejercicios anteriores, y algunos de los permisos que se solicitan tienen que resolver algún tipo de deficiencia, por lo que los permisos no se conceden hasta que esta se resuelve. Asimismo, hay establecimientos hoteleros que piden más de una licencia con el fin de poder introducir modificaciones en el proyecto durante el transcurso de las obras.
La mayoría de las ampliaciones o reformas corresponden al incremento de categoría de los hoteles donde se llevan a cabo, señalan desde el Consistorio.
Para hacerse una idea de la oleada de rehabilitaciones, reformas y construcciones de nueva planta que se han llevado a cabo en las zonas turísticas de Calvià durante los últimos siete años, apuntar que sólo en Palmanova y Magaluf, únicamente el 13 por ciento de las plazas hoteleras (cerca de 4.000 de un total de 30.000) corresponde ya a establecimientos no reformados.
Y si se tienen en cuenta las reformas que aún están en marcha y aquellas previstas para los próximos dos años, el destino contará con un 70 por ciento de plazas entre los segmentos de cuatro y cinco estrellas. Una proporción muy superior, incluso, a la media española.
El esfuerzo realizado por las empresas con establecimientos radicados en Palmanova y Magaluf ha representado la reforma y mejora de calidad del 83 por ciento de la planta hotelera, con una inversión superior a los 380 millones de euros.