Tras años de peleas urbanísticas, de polémicas territoriales y de vaivenes de planeamiento, los terrenos en los que debía haberse construido el polémico hotel de 2.000 plazas en sa Ràpita pueden quedar protegidos este mismo mes de forma definitiva.
El Consell de Mallorca tiene previsto aprobar el Plan de Intervención en Ámbitos Turísticos y toda la zona de sa Ràpita, incluidos los terrenos del hotel y un área colindante, dejará de tener uso turístico y pasará a ser de uso residencial. Ello impedirá la construcción del polémico hotel, una amenaza que sigue latente mientras no se modifique el Plan Territorial de Mallorca.
No turístico
Toda el área de sa Ràpita pasará a ser considerada zona de segunda residencia, no turística, pero eso no significa que en los terrenos del hotel se vayan a construir viviendas porque simultáneamente la zona quedará protegida.
El avance del PIAT se presentó el verano pasado en una rueda de prensa conjunta que ofrecieron el entonces conseller de Turisme del Govern, Biel Barceló, y la consellera de Territori del Consell, Mercedes Garrido. Una de las novedades del documento fue que toda Mallorca pasó a tener la consideración de zona turística en la que se delimitaron 10 subsistemas en función del grado de desarrollo de la oferta turística.
El siguiente trabajo ha consistido en delimitar cuáles de estas zonas son netamente turísticas y cuáles no y a partir de ahí se distingue entre áreas residenciales y áreas de segundas residencias, que es como quedará sa Ràpita.