El Ajuntament de Calvià ha concluido una campaña de control del cumplimiento de los derechos y deberes de los propietarios de mascotas que le ha llevado a inspeccionar a 476 perros en 18 días.
La campaña para velar por el cumplimiento de la ordenanza de Bienestar Animal que entró en vigor el año pasado se ha dividido en dos fases. La primera se extendió del 24 de enero al 3 de febrero y tuvo un carácter esencialmente informativo. En esas semanas los vigilantes del departamento municipal de Medio Ambiente supervisaron 325 perros e informaron a sus respectivos dueños de las exigencias de la mencionada ordenanza municipal.
No obstante, la segunda fase de la campaña, que se desarrolló del 5 al 18 de febrero con la colaboración de la Policía Local, sí que tuvo un carácter, además de informativo, coercitivo: se inspeccionaron 151 perros y se interpusieron 12 denuncias a sus cuidadores por incumplimiento de la ordenanza.
Los objetos de estos 12 expedientes sancionadores fueron los siguientes: cuatro por llevar el perro suelto, tres por no portar la bolsa preceptiva para recoger los excrementos y cinco porque el animal no llevaba el chip obligatorio.
Desde el Consistorio calvianer se congratulan de los resultados de la campaña, puesto que estos revelan que sólo una minoría no cumple con la ordenanza de Bienestar Animal.