El Ajuntament de Sineu hizo este viernes público que ha iniciado un procedimiento sancionador contra un ciudadano por haber tirado una lavadora dentro de un pozo público. El infractor será sancionado con una multa de entre 301 y 1.500 euros, tal y como recoge la ordenanza medioambiental; además, deberá hacerse cargo de limpieza y eliminación de los residuos.
El responsable fue descubierto por otras personas cuando cometía la infracción. Luego, esas personas que lo presenciaron se pusieron en contacto con el Consistorio para explicarle lo ocurrido. El pozo público en que fue desechada la lavadora es el llamado Pou de sa Casa Baixa, en el Camí Vell de Costitx.
Este pozo fue restaurado hace un año y medio por el Ajuntament: se desbrozó el entorno, se reformó el cuello y se instaló una tapadera con candado para evitar posibles accidentes y que se arrojaran cosas al interior. Cuando los responsables del Ajuntament visitaron el pozo comprobaron que alguien había roto la tapadera.
El pozo está empedrado de arriba abajo. La lavadora no llegó a tocar el fondo de la perforación, sino que se quedó suspendida, atravesada entre las piedras de las paredes del pozo. Es posible que para retirar la lavadora se precise la ayuda de un camión grúa.
El Ajuntament de Sineu considera que los hechos «son muy graves» y que «hay que trabajar para que dejen de producirse, aunque, por desgracia, aun son muy frecuentes en nuestros días». En este sentido, la institución considera «muy necesario» que la ciudadanía tome conciencia y actúe antes estas actuaciones, «puesto que la colaboración ciudadana es básica e imprescindible si queremos luchar a favor de la conservación del medio ambiente».