El temporal marino de principios de semana ha dejado huella, una vez más, en la playa de Cala Millor. El extremo norte se ha visto afectado y un tramo se ha quedado sin arena, dejando al descubierto las rocas y ofreciendo una imagen desoladora. Y es que esta playa, en su inicio y en su final, ha sufrido en los últimos años una modificación de su perfil debido a la pérdida constante de arena.
La situación se repite año tras año y con el mismo ciclo natural. Posteriormente se vuelve a regenerar. El alcalde de la localidad, Antoni Servera, explicó que «el temporal ha provocado que la playa haya disminuido en un par de metros. Es una situación que se repite cada año. La arena queda en la misma playa y va creciendo y decreciendo según los fenómenos meteorológicos». Este arenal pasa por varios cambios morfológicos que requieren actuaciones.
Desde el Ajuntament, Servera explicó que «se está analizando la situación para ver cuales son los pasos que hay que seguir para mejorar su imagen». Cala Millor es una de las playas más controladas durante las 24 horas, ya que está monitorizada por parte del Sistema d'Observació Coster de les Illes (SOCIB).