Un día soleado, una propuesta gastronómica atractiva al aire libre y una ocupación hotelera extraordinaria fueron los artífices, un año más, del éxito de la Mostra de la Llampuga que, en su XVI edición concentró a miles de personas en el puerto de Cala Rajada para degustar hasta 20 maneras diferentes de cocinar este pescado.
A mediodía se abrieron las puertas y una avalancha de vecinos, visitantes y muchos turistas, fueron a la búsqueda de una receta, original o innovadora, para catar esta especie que, con el tiempo, se ha convertido en un plato selecto. Ello gracias a que la Confraria de Pescadors de Cala Rajada apostó, hace más de una década, por promocionar la llampuga. Se trata de una muestra única que atrae a esta zona del Llevant muchas personas procedentes de diferentes lugares.
Asimismo, edición tras edición, son muchos los turistas que llegan hasta Cala Rajada con motivo de este evento culinario.
Un total de 20 estands de bares, restaurantes, hoteles, los pescadores, presentaron diferentes recetas, desde el arròs sec o los fideus de llampuga, hasta el tatin, croquetas, pizza o wok de llampuga, que entre otros hicieron las delicias de los paladares más exigentes.
La Mostra recibió la visita de las autoridades locales encabezadas por el alcalde, Rafel Fernández junto con el conseller de Medi Ambient, Vicenç Vidal; el de Treball, Iago Negueruela; el director general de Pesca, Joan Mercant, representantes del Consell o la Associació Hotelera.
Estuvo abierta de las 12 a las 16 horas y de las 18 a las 22 horas. Un castillo de fuegos artificiales puso la guinda a un fin de semana lleno de buena gastronomía y que ha servido como promoción del municipio ya que miles de personas, durante este largo puente, han visitado Cala Rajada.