El departamento de Medi Ambient del Ajuntament de Llucmajor ha abierto un total de 175 expedientes sancionadores desde principios de 2017. En este momento el Consistorio tramita las sanciones que pueden conllevar multas de entre 60 y 300 euros, las leves y de hasta 3.000 euros para las graves.
Las principales infracciones son por vulnerar la ordenanza reguladora de la limpieza viaria, recogida y tratamiento de residuos sólidos urbanos y también la de tenencia de animales. Los 175 expedientes han sido abiertos por los técnicos del departamento de Medi Ambient y la sección PUMA de la Policía Local, especializada en delitos contra el medio ambiente. Pero también se han detectado infracciones gracias a la colaboración ciudadana.
El número más importante de expedientes, 46, se ha abierto a vecinos que cuentan con solares sucios, sin mantenimiento y sin cerrar. El resto de sanciones son por depositar restos de poda en la calle o en contenedores (29); dejar residuos fuera de los contenedores de recogida (17); verter residuos peligrosos tales como neumáticos o pinturas (5); dejar perros sueltos o no recoger los excrementos (18); verter residuos en caminos rurales (15) y 45 más relacionadas con otras conductas incívicas.
Jaume Tomàs (Més), regidor de Medi Ambient, señala que las malas prácticas de algunos de los usuarios suponen un gasto extra de 250.000 euros cada año para el Ajuntament. «Aparte del servicio de recogida regular, desde hace años hemos tenido de poner un servicio extra para limpiar todos los vertidos y restos que la gente tira o deja fuera de los contenedores de los puntos de recogida. Un camión de la brigada con un operario por la mañana y otro por la tarde toda la semana».