Los Cossiers de Alaró escenificaron este miércoles el Ball de l?Oferta por vigésimo quinta vez desde su recuperación. Y lo hicieron con dos mujeres en la colla: Aina Sastre, que en las fiestas de Sant Roc del año pasado ya interpretó el papel de dama, y de Francisca Rosselló, que también había bailado como dama en mayo de este año, en las fiestas de los Damunt. La novedad es que Rossselló y Sastre bailaron este miércoles como cossieres, mientras que el papel de dama lo hizo un chaval.
Junto a Son Sardina ?donde todos los integrantes de la colla son mujeres?, Alaró es pues el primer pueblo en que las chicas bailan como cossieres. En Manacor, Pollença o Algaida únicamente han hecho el papel de dama (la colla de Monutïri está formada únicamente por hombres).
Además de los cambios relacionados con el género, la colla de Alaró presentaba otra novedad; los rostros de Joan Fuster y Gaspar Herráez, que este miércoles se estrenaron. El primero actuó como cossier, mientras que el segundo hizo de dimoni.
Alaró celebró el vigésimo quinto aniversario de la recuperación de los Cossiers, que dejaron de bailar en los años posteriores a la Guerra Civil. Durante la década de los años 80 hubo alguna tentativa para recuperarlos, pero no cuajó. La publicación del libro de Franesc Vallcaneras Els cossiers d?Alaró (1990) sentó las bases para que se hiciera efectiva. No obstante, no bailaron hasta dos años después.
Los alaroners recuerdan la entusiasmo que levantó la recuperación de la colla en 1992. No obstante, también se acuerdan de la «casi indiferencia» de los años siguientes, «cuando poca gente iba a verles». Actualmente son muy valorados y cientos de personas les acompañan en sus salidas. Se han convertido en una de las señas identidad del pueblo. Una de las imágenes que mejor ilustraron el 25º aniversario fue la de Francisca Rosselló con el traje azul de cossiera. Francisca Rosselló es hija de Jaume Rosselló, uno de los componentes de la colla de 1992. Su padre también se estrenó con el traje azul.