La ampliación del contrato de limpieza aprobada en el pleno ordinario del pasado lunes generó un fuerte debate y duras críticas por parte de los grupos de la oposición (PSOE, Volem y Més-Esquerra). Todos ellos coincidieron en reprochar al equipo de gobierno la decisión de «regalar 190.000 euros a una empresa que está incumpliendo de manera sistemática el pliego de condiciones».
En la sesión plenaria se llevó a aprobación la modificación del contrato de limpieza viaria a la empresa LUMSA, que incluye una mayor frecuencia de limpieza en algunas calles, la apertura durante más horas del parque verde o la ampliación de la recogida de poda doméstica, entre otras cuestiones.
El alcalde Pedro Rosselló justificó esta ampliación para dar una respuesta «a las quejas reiteradas de vecinos de que Manacor está sucia».
Desde Volem, Carlos Grimalt apuntó que «no vamos por buen camino. Damos 190.000 euros más a una empresa que no cumple. La concesionaria no perderá dinero y no repercutirá en beneficio de los trabajadores».
Desde el PSOE, Sebastià Nadal se mostró «incrédulo» en el sentido de que, «ampliamos las frecuencias a una empresa que ha demostrado que no cumple y ahora resulta que le hacemos un regalo a coste de los ciudadanos».
Desde Més, Miquel Oliver defendió que «no queremos participar en un paripé. No vamos a dar nuestro apoyo. No se cumple con lo establecido para que encima se tengan que dar compensaciones. Manacor está sucio y esto no se puede emplear como excusa para ampliar el contrato. Este incremento ya estaba previsto y esto ayuda a aumentar las sospechas sobre su gestión».
Por otra parte se exigió al alcalde que exija el cumplimiento del contrato y se puso sobre la mesa la posibilidad de municipalizar el servicio.