Llevan años denunciando las agresiones que padecen los torrentes de las Illes Balears, bien sea como consecuencia de los impactos de las industrias locales bien sea por los vertidos de aguas de las plantas depuradoras dependientes de la Administración, pero los avances han sido mínimos, por no decir inexistentes. El portavoz del Grup d'Amics en Defensa del Medi Ambient (GADMA), Bernat Fiol, denunció ayer una vez más la contaminación del torrente de Solleric. Explica que el viento de la última semana ha disparado la presencia de restos de poliestireno extrusionado (poliespan) en la zona.
El portavoz de GADMA recuerda que «el torrente de Solleric es con total seguridad el más contaminado de Balears por las malas prácticas de un grupo de empresas y de la administración». En este sentido recuerda que, no solo se trata de poliespán, además hay una lavandería y también corren por el cauce del torrente de Solleric las aguas depuradas de Alaró, Santa Maria y Consell. «En solo cinco kilómetros se produce un vertido y acumulación de porquería increíble», dice Fiol.