Un acuerdo firmado este martes entre el propietario de Son Puça, Antoni Pons Puig, y la empresa Fet a Sóller, convertirá tres hectáreas de terreno actualmente improductivo en el naranjal más extenso e importante de Sóller, el primero que tendrá además de finalidad productiva un carácter experimental encaminado a la obtención de la Denominación de Origen para las naranjas de Sóller y Fornalutx.
Según explicaron Antoni Pons y Franz Kraus, este último propietario de la conocida empresa agroalimentaria Fet a Sóller, «hemos acordado crear la empresa Horts de Sóller para explotar una parte de la antigua finca de Son Puça, plantando variedades locales con el objetivo de la DO y de recuperar estos terrenos, tanto desde el punto de vista agrario como paisajístico».
Inicialmente se ha formalizado un contrato de 5 años. Explicaron que «la intención es plantar inicialmente entre 600 y 1.000 árboles de distintas variedades locales sobretodo canoneta, aunque también se experimentará con salustiana, una variedad que actualmente no se cultiva en Sóller».