El lulista y canónigo de la Seu Sebastià Garcias Palou es desde este jueves hijo ilustre de Inca. Así lo aprobó el pleno tras las defensas de los regidores Gori Ferrà y Antoni Rodríguez que actuaron como ponente y fiscal, respectivamente, del expediente. La iniciativa de distinguir a Garcias surgió de la Fundació Es Convent.
Un cuadro de «uno de los estudiosos más fervientes de Ramon Llull», tal y como lo definió Antoni Rodríguez, cedido por la familia, presidió el pleno de ayer por la tarde. Justamente al tratarse de una figura que se volcó en el estudio de Ramon Llull y que fue autor de más de 300 artículos sobre la obra del autor de Blanquerna, el Ajuntament d'Inca ha querido enmarcar el acto en el año 2016 en el que se celebra el Año Ramon Llull.
Sebastià Garcias Palou (Inca, 1908-1993) es el lulista más universal que ha dado la Isla. Fue elegido rector de la Maioricensis Schola Lullistica y pronunció conferencias y dirigió seminarios sobre distintos temas relativos a la figura y obra de Ramon Llull en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas. En 1960, el Gobierno español le otorgó la Encomienda de Isabel la Católica y en 1976 la Diputación Provincial de Balears le concedió la medalla de Plata de la Provincia. En 1986 recibió la Medalla d'Or de la Comunitat Autònoma.
Tras hablar de manera extensa sobre la biografía y obra de Sebastià Garcias Palou, el regidor Gori Ferrà también recordó que el Ajuntament d'Inca ya reconoció la figura del protagonista un año después de su muerte. Fue el 1 de diciembre del año 1994, siendo alcalde Jaume Armengol y regidor de Cultura Antoni Alorda, cuando el pleno acordó poner el nombre de Sebastià Garcias Palou a una calle de Inca.
«Un acto de reconocimiento público hacia la figura del lulista tan importante en un momento de la historia tan crucial de la historia del pensamiento del siglo XX», según palabras de Ferrà.