El Ajuntament de Lloseta ha abierto dos expedientes sancionadores por vertidos ilegales de residuos peligrosos en el polígono industrial de la localidad y ha propuesto una sanción de 300.000 euros en ambos casos por falta muy grave.
La Policía Local de Lloseta ha determinado la gravedad del vertido por el hecho de que entre los residuos había materiales perjudiciales para las personas y el entorno como uralita y amianto, ha informado el consistorio en un comunicado.
La elevada sanción deriva de la nueva ordenanza municipal de residuos que entró en vigor el pasado julio, que permite castigar las faltas muy graves con multas que van de los 45.000 hasta los 1.750.000 euros.
Los vertidos han sido detectados en los últimos días en la calle Margers y la investigación policial ha permitido identificar a los supuestos autores, una empresa de construcción y un particular empadronados en Palma y en Binissalem.
El alcalde de Lloseta, Tolo Moyà, ha explicado que «no existe una problemática demasiado elevada» por vertidos de residuos de este tipo en el municipio pero ha indicado que el ayuntamiento quiere «actuar de forma contundente para evitar que puedan proliferar en un futuro».
«Estas actuaciones son muy graves y no se pueden tolerar de ninguna de las maneras. Pensamos que con sanciones ejemplares no se repetirán», ha insistido Moyà, quien ha recordado que la ordenanza municipal se modificó incrementando la cuantía de las multas precisamente con ese objetivo.