La huelga de trenes de Serveis Ferroviaris de Mallorca (SFM) se dejó notar este lunes por la supresión de las frecuencias en hora punta. Esta situación provocó que los convoyes posteriores se llenaran. También se produjeron aglomeraciones de viajeros en los andenes.
Hubo quejas de personas que llegaron con retraso a sus puestos de trabajo. Aun así, los servicios de autocares de transporte por carretera no vieron aumentar la demanda, que fue práticamente la misma de cada lunes.
Los paros afectaron a todos los servicios de tren comprendidos entre las 5.30 y las 6.30, las 8.00 y la 9.00, las 15.00 y las 16.00, y las 18.00 y las 19.00 horas. Un total de 56 servicios suspendidos.
Alfredo Gutiérrez, del comité de empresa, declaró que «hemos planteado unos paros de 4 horas por jornada de huelga. Podríamos haber previsto una huelga más dura. Aun así, la empresa no muestra la más mínima intención de reunirse con nosotros. Si se mantiene en esa actitud, no descartamos paros más extensos e incluso que afecten al Dijous Bo». El Dimecres Bo sí está afectado por la convocatoria de huelga.
Por su parte, Mateu Capellà, gerente de SFM indicó que «en líneas generales, podemos decir que no se han generado problemas importantes».